Page 16 - Costos

2 CONVERSACIONES SOBRE EL TEMA

enormidad. Se puede entonces perder una licitación de honorarios para el stand de una exposición pensando que va a tener un 25% de gastos, cuando es posible que no supere el 6%.

DRA: ¿Qué ocurre si los honorarios no cubren los costos del proyecto?

FH: El caso donde más aprendimos fue una obra muy importante para nosotros, una clínica. No teníamos la suficiente experiencia de cotizar honorarios para obras grandes, si bien sabíamos que los honorarios se calculan con un porcentaje menor sobre el costo cuando las obras son de mayor envergadura; pero lo cierto es que no teníamos el dato justo de cuánto se reducían los porcentajes de los costos. Así aceptamos un valor que parecía razonable y que terminó siendo, a la postre, perjudicial. Pese a todo, terminamos la obra, y el cliente quedó conforme. Pero aprendimos que no hay que tomar obras cuyos honorarios no cubran los costos.

El segundo caso fue el de un banco que nos dio mu-chas sucursales allá a principios de la década del ’90. En determinado momento, el banco nos solicitó una reducción de los honorarios en virtud de la cantidad de obras que nos adjudicaban. No le dimos el des-cuento y también rechazamos algunas de las obras para que el estudio no estuviese dependiendo de un único cliente. Ellos salieron a buscar mejores precios y es seguro que los consiguieron. Pero al poco tiempo, ocurrió el conocido “efecto tequila” que redujo las obras en casi todos los bancos. Nosotros habíamos diversificado nuestra clientela y el efecto tequila tuvo poco efecto en nuestras encomiendas.

DRA: Creo que este es el límite del mercado. Llega un momento en que los costos no pueden seguir bajando. Y si el cliente consigue honorarios más bajos, hay que dejar que compre a esos precios, a ver cómo le va...

FH: Es así, y esto le puede servir a los arquitectos jóve-nes: a veces un arquitecto cree que tiene trabajo, pero

El costo de producción del proyecto

A propósito del ejemplo del cálculo de honorarios que aplica el estudio Serra Valera, transcribimos un extracto del documento C-07 del MEPA “El

en realidad se está hipotecando. Ocurrió muchas ve-ces con las casas. Se pactan honorarios que no cubren los costos y cuando las cuentas no cierran, con los adelantos de la próxima casa, se pagan los costos de la anterior. Pero en algún momento este arquitecto se percata de que hizo 5, 6 ó 7 casas en un año y de que estos honorarios no cubrieron sus gastos, todo ello sin tener estudio, secretaria ni demasiada infraestruc-tura. Entonces, el segundo paso (el segundo error), es dedicarle menos tiempo a esas obras y tomar nuevas obras: ¡otra hipoteca! Porque en definitiva lo que se está generando son problemas a futuro: las obras se terminan mal y los clientes quedan insatisfechos. Por lo tanto, bajar los honorarios no sirve.

Volvamos a los componentes de los honorarios: uno es tangible, los costos directos; y tres componentes intangibles: la responsabilidad que se asume, el riesgo inherente, y el tercer punto, el más avasallado de todos, la propiedad intelectual. Curiosamente, la variable suele ser aquello sobre los dos componentes que no hay que ajustar de ninguna manera: primero, el riesgo, que al momento de calcular el honorario, no lo percibo. Es decir, que si se tiene un problema con un proyecto, no lo voy a poder afrontar con honora-rios bajos, porque no se está cobrando el riesgo. ¡Más hipotecas!. En segundo término, se excluye del hono-rario la propiedad intelectual, que está protegida por ley. O sea que le estamos regalando a un cliente nues-tro proyecto para que en definitiva él lo usufructúe.

DRA: Refiérame un comentario sobre sus estudios de postgrado, de donde intuyo, proviene su punto de vista.

FH: Hice una maestría en Administración de Em-presas en el IAE (Instituto de Altos Estudios Empre-sariales) que es una institución que depende de la Universidad Austral. Es la maestría mejor calificada de la Argentina y de Latinoamérica, y número 28 en el ranking mundial. Si bien sigo dedicado al proyecto y dirección de obras, me dio la posibilidad de entender de otra manera la profesión.

proyecto de las obras”, en su acápite dedicado al costo de producción de un proyecto. Siempre es conveniente que el arquitecto efectúe un presupuesto para estimar su costo de producción

2.3 Del Manual del Ejercicio

Profesional del Arquitecto (MEPA)