#46 - Responsabilidades
• 56 #DOSSIER COVID HABLEMOS DE ARQUITECTURA Los desafíos para la planificación urbana Por Sergio Lanzafame Margarita Charrière, Roberto Converti, Ana Falú y Alberto Varas se explayaron en sus videos sobre las marcas que dejará el COVID-19 en las ciudades, cómo se reconfigurará el hábitat, cuál será el rol del Estado y qué pasará con la densificación. U n mundo en cuarentena a causa de un virus mortal. Lo que años atrás podría haberse pensado como un mal sueño hoy es una realidad con la que hay que convivir. Por supuesto que la solución de fondo corre por cuenta de médicos, bioquímicos y laboratorios, quienes tie- nen a su cargo el descubrimiento de la vacuna. Pero muchí- simas personas miran o leen con interés lo que tienen que decir los/as urbanistas. Sucede que a la hora de echar culpas sobre la dispersión del virus y el aceleramiento de la curva de contagios, así como de saber sobre las medidas para que esto no vuelva a ocurrir en el futuro, el ojo se posa sobre las grandes ciudades y las condiciones de vida que éstas impo- nen a millones de habitantes en el mundo. Desde miradas distintas, los/as especialistas convoca- dos/as dejaron en claro que la pandemia nomodifica sustan- cialmente los desafíos que están presentes desde hace años y que sólo potencian la atención que hay que prestarles. Margarita Charrière, directora del Observatorio Metro- politano del CPAU, fue enfática al respecto. El COVID-19 trae «los mismos desafíos que deben enfrentar desde hace largo tiempo los estados» y pone como ejemplo que el Club de Roma en los años setenta y en los siguientes, anticipaba que la mala administración de los recursos naturales traería «una suerte de catástrofe, deterioro del medio ambiente, cri- sis institucionales, creciente brecha entre ricos y pobres. Las mismas cosas de las que hoy estamos hablando con un creci- miento urbano incontrolado». Recordó, también, que hace unos años en una reunión cumbre en Brasil, advertían que «el mundo superaría el billón de habitantes en asentamien- tos precarios o con acceso casi nulo a los servicios básicos en el breve plazo de 10 años». Es decir: los diagnósticos estaban, pero no llegaron las soluciones. «¿Qué ha cambiado? ¿De qué se han ocupado los organismos internacionales y los es- tados para comenzar a revertir esta situación?», se preguntó. Con el mismo análisis de largo plazo, Alberto Varas, ti- tular del estudio Alberto Varas & Asociados, planteó que los verdaderos desafíos son más estructurales y no responden a cuestiones coyunturales como las que trae la pandemia. «Tenemos que pensar que estos fenómenos son similares a otros que ha habido a lo largo de la historia, incluso de la his- toria contemporánea», señaló. Sin embargo, la Arquitectura trabaja con «una cronología distinta» y los problemas espe- cíficos que trae el COVID-19 pueden ser pensados desde al- gún área de la profesión, como la construcción de hospitales, pero los verdaderos problemas son de larga data. Roberto Converti, decano de la Facultad de Arquitectu- ra y Diseño de la UADE, recorrió un camino similar, aun- que puso el foco en la gestión de las ciudades, que pasó «de la resolución de los conflictos de coyuntura a priorizar los deseos y demandas presentes de los ciudadanos». Por eso, señaló que la novedad en la actual coyuntura es ver «cómo el aislamiento pone en evidencia que el modo que hasta hoy era considerado políticamente correcto dejó de lado el com- prender, pensar y atender el territorio habitado a partir de la planificación como estrategia de anticipación». Ana Falú, profesora emérita de la UNC (Universidad de Córdoba), investigadora y académica feminista, prefirió po- ner el acento en cómo la pandemia potencia la desigualdad que ya existe en torno al acceso a la vivienda y a las condicio- nes de vida, y en cómo eso afecta principalmente a las mu- jeres. Señaló que «el fenómeno del COVID-19, que genera
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